sábado, 10 de mayo de 2014

TRES TIPOS DE EMPRESAS Y LA VENTAJA COMPETITIVA

Tres tipos de empresas y la ventaja competitiva

Por: Fernando Cárdenas E.
Entender las diferencias entre los tipos de compañías es importante para poder analizar la forma en que estas construyen su ventaja competitiva. Con los avances en la tecnología, el desarrollo del internet, la creciente importancia de las empresas de servicios y el incremento en la incertidumbre de los negocios, se hace necesario explorar nuevos modelos de creación de valor. El modelo tradicional de Porter que estudia la cadena de valor, construido para analizar las diferentes actividades de importancia estratégica en las compañías tradicionales de manufactura, no resulta fácil de aplicar a otro tipo de compañías como las de servicio o las plataformas basadas en redes.

En este artículo basado en un interesante análisis realizado por Stabell y Fjeldstad, explicamos cómo los tres tipos o categorías de compañías: 1. De Transformación, 2. Intensivas en conocimiento y 3. De Red, utilizan modelos diferentes de creación de valor y consecuentemente de construcción de ventaja competitiva útiles para el análisis de  diferentes industrias.

El tradicional análisis de la cadena de valor, deberá transformarse en el análisis de la configuración de valor con el fin de entender como construyen las ventajas competitivas las empresas de las diferentes industrias.

1.     Empresas de transformación
La configuración de valor en estas empresas es la cadena de valor tradicional en donde la lógica de creación de valor se basa en la transformación de factores de entrada en productos. Las actividades principales son las descritas por Porter: 1. Logística de entrada, 2. operaciones, 3. logística de salida, 4. mercadeo y 5. servicio. La interacción entre estas actividades es secuencial y los principales “drivers” de costo son las economías de escala y la utilización de la capacidad. 

2.     Empresas intensivas en conocimiento
Estas empresas crean valor al resolver problemas de sus clientes y son intensivas en conocimiento y tecnología, entendida la tecnología como la aplicación de conceptos científicos a las realidades de mercado. Las actividades en este tipo de compañías para la construcción de valor son: 1. La adquisición y determinación de los problemas de los clientes, 2. La solución de estos problemas, 3. Construcción de las alternativas de solución y definición, 4. Ejecución de la solución y 5. Control y evaluación de los resultados. La interacción entre estas actividades es cíclica y el principal “driver” de valor es la reputación.

3.     Empresas de Red
La lógica de creación de valor en estas compañías está en juntar clientes (diferentes participantes en una plataforma), entre sí. Las actividades primarias de este tipo de organizaciones son: 1. Promoción de la red o plataforma y gestión de los contratos o acuerdos, 2. Entrega de los servicios de la plataforma y 3. Operación de la infraestructura.  Estas actividades son simultáneas o paralelas y los principales “drivers” de valor dependen del rápido crecimiento de los participantes de la red con su adecuada selección y son: alcanzar escala, utilizar la capacidad y lograr los efectos de red.

Como se puede observar claramente del análisis anterior, las lógicas de creación de valor y de construcción de ventaja competitiva de los tres tipos de compañía son diferentes. Por lo tanto cada tipo de negocio debe ser manejado de forma diferente utilizando estructuras organizacionales distintas para implementar la estrategia. Las empresas de transformación deben utilizar las estructuras tradicionales diseñadas alrededor de las actividades de la cadena de valor y de soporte. Las compañías intensivas en conocimiento deberán tener estructuras por equipos con autonomía sobre la solución de los problemas y segmentación por especialidades. Las empresas de red, deberán organizarse en estructuras altamente flexibles con equipos temporales pequeños con alta autonomía para gestionarse y coordinar entre sí.





sábado, 3 de mayo de 2014

LA METODOLOGÍA PARA INNOVAR

La Metodología para Innovar

Por: Fernando Cárdenas E.
Desde hace varios años en LIFT Growth and Innovation nos hemos preocupado por estudiar los modelos de innovación y por desarrollar una metodología práctica que se adapte a la realidad de las empresas en los países en vía de desarrollo. Entendemos la innovación como parte integral de la estrategia de expansión de los negocios y como elemento fundamental para construir una ventaja competitiva que permita a las organizaciones crear y capturar valor con objetivo de rentabilidad.

La metodología que hemos adoptado en LIFT es un compendio de las mejores prácticas, teorías académicas e investigaciones recientes sobre la innovación como elemento central de la construcción de ventaja competitiva.

Hoy en día es fácil encontrar expertos y consultores de innovación, pero en su gran mayoría estos están enfocados en los temas creativos y se preocupan principalmente por cómo generar ideas dentro de las organizaciones. Nosotros, si bien creemos que la creatividad y la inventiva son elementos importantes de la innovación y estamos convencidos del valor de las herramientas creativas, consideramos fundamental la disciplina y el encaje estratégico. Es por eso que en este artículo presentamos un enfoque de innovación orientado a la construcción de ventajas competitivas dentro de un claro marco estratégico que sustenta el crecimiento de las organizaciones.

La metodología consta de 8 componentes: 1. Análisis estratégico, 2. Modelo de crecimiento, 3. Disciplina de valor, 4. Ambición de innovación, 5. Componente base de la innovación, 6. Tipos de innovación y su combinación, 7. Ingeniería Básica y 8. Ejecución.

1.      ANÁLISIS ESTRATÉGICO

Como ya mencionamos, nuestro modelo está basado en un conocimiento profundo de la estrategia de la compañía para la creación y captura de valor. Para esto es primordial entender el entorno competitivo y la situación de la organización, analizando temas como los factores que afectan o impulsan la industria, la competencia y su estrategia, los sustitutos, las tendencias y características de los clientes y consumidores y los problemas que quieren resolver, el momento en el ciclo de vida de la industria, las fuerzas y las características competitivas del negocio, y los recursos y capacidades de la organización.    

2.      MODELO DE CRECIMIENTO

Una vez conocida la situación competitiva y la estrategia del negocio, con base en toda la información recopilada y analizada en el paso anterior, se deben definir las necesidades y expectativas de expansión y construir un modelo de crecimiento que incluya las definiciones básicas de la estrategia de crecimiento del negocio actual con base en las competencias y los recursos existentes. Es importante construir escenarios para ver cómo deben evolucionar esas competencias y recursos para alcanzar un segundo horizonte de crecimiento con base en su adaptación, en la construcción de nuevas competencias y en la adquisición o desarrollo de nuevos recursos para atender mercados o líneas de negocio adyacentes. Finalmente, es necesario tener un conocimiento básico de las fuentes de crecimiento de largo plazo en un horizonte en el cual se inventan y desarrollan nuevos negocios basados en competencias y recursos que aun no se poseen y que hagan obsoletas las competencias y el modelo de negocio actual. 

3.      DISCIPLINA DE VALOR

Es necesario entender el crecimiento y la estrategia desde la perspectiva de la propuesta de valor que la organización ofrece a sus clientes y consumidores. La compañía deberá optar por una disciplina de valor de excelencia operacional, de intimidad con el cliente o de liderazgo en producto, y redactar desde el punto de vista de los clientes y consumidores cual es el trabajo que nuestros productos o servicios deberán realizar para ellos.  Este es un punto central, y uno en que  la mayoría de las compañías y emprendimientos, se equivoca. Muchas veces las compañías quieren ser muchas cosas para los clientes al mismo tiempo y sus propuestas de valor son inconsistentes con sus procesos, sus culturas o los perfiles de sus colaboradores. Es frecuente también que expresen sus propuestas de valor en términos de los productos y servicios o tecnologías y se olviden de lo que realmente quieren los clientes, es decir de lo que los productos o servicios hacen para ellos con el fin de resolver sus problemas.   

4.      AMBICIÓN DE INNOVACIÓN

Teniendo en cuenta todo lo anterior y con base en la madurez de la organización en términos de innovación,  la compañía debe definir su ambición innovadora. Es decir, que tan agresiva debe ser su estrategia de innovación en función de la disrupción. En muchos casos puede ser preferible comenzar con innovaciones adyacentes o inclusive incrementales, pero hay momentos o circunstancias de la industria o del entorno que obligan a considerar la innovación disruptiva como única opción de supervivencia.  Más temprano que tarde todas las organizaciones deberán preocuparse por construir una combinación de estos tres tipos de innovación en su modelo de crecimiento, para poder perdurar en el tiempo. Sin embargo, es más fácil empezar a mostrar logros de innovación en el campo incremental e ir desarrollando competencias y recursos para avanzar en innovaciones adyacentes y luego disruptivas, pues las estructuras, perfiles, métricas e incentivos de cada una de estas innovaciones son diferentes.

De todas maneras es importante insistir en que en el mundo actual dinámico y lleno de incertidumbre, la innovación incremental no es suficiente para competir en el largo plazo e incluso no es garantía de supervivencia. 

5.      COMPONENTE BASE DE LA INNOVACIÓN

Cada unidad de negocio y la organización en general, deberán tener claridad de cuál es la base sobre la cual se construye la innovación. Se debe definir si el elemento central de la innovación es el modelo de negocio, la oferta de productos, servicios o sistemas; o la experiencia del cliente.  Esta base servirá como guía para seleccionar los tipos de innovación prioritarios y su combinación.

6.      TIPOS Y COMBINACIÓN

Con el componente base de la innovación como “ancla”  que relaciona las iniciativas con la propuesta de valor, se construye la combinación de los tipos de innovación. Si se trata de una ambición de innovación incremental, normalmente se utilizan 1 o 2 tipos de innovación. En el caso de innovación adyacente pueden combinarse 3 o 4 , y si la ambición es disruptiva se utilizan 5 o más tipos de innovación.

Cuando el componente base es el modelo de negocio, los tipos de innovación pueden ser: El modelo de rentabilidad, la estructura de redes, la estructura de la organización y de sus activos o sus procesos.

Si se trata de la oferta de productos, servicios o sistemas, las alternativas son: desempeño de los productos o servicios y de sus sistemas.

Cuando la base es la experiencia del cliente, los tipos de innovación pueden ser: Servicio, Canales, Marca o involucramiento del cliente. 

7.      INGENIERÍA BÁSICA

La ingeniería básica o el “blueprint” de innovación, consiste en una descripción de los lineamientos de innovación que define el trabajo, los métodos y las iniciativas necesarias para llevarla a la realidad. La organización que lidera estas iniciativas y cómo ésta se conecta con el resto de la compañía. Los recursos y competencias necesarios para que la estrategia de innovación sea exitosa en su implementación. Y finalmente las métricas e incentivos necesarios para medir y estimular la ejecución.   

8.      EJECUCIÓN:

La ejecución deberá seguir un proceso disciplinado que arranca por las definiciones presentadas a lo largo de este artículo y centradas en el conocimiento profundo de las personas que conforman el grupo potencial de clientes y usuarios. Con base en los conceptos de innovación que se elaboran a partir de los “insights” obtenidos de la observación de las personas, se construyen prototipos, se ponen en práctica pilotos para finalmente lanzar en vivo las iniciativas en el mercado. Este proceso no es lineal y los hallazgos en su desarrollo pueden hacer que la organización tome decisiones que afecten las definiciones que se tenían y comenzar de nuevo.


En conclusión, la innovación termina siendo mucho menos arte de lo que muchos piensan y requiere de una disciplina, de metodología y de herramientas. Hay que innovar con una misión determinada y no en forma aleatoria con el fin de realmente lograr el sueño de toda compañía de crear una ventaja competitiva que se materialice en rentabilidad.  

viernes, 21 de marzo de 2014

LAS TRES CLASES DE INNOVACIÓN Y CUANDO USARLAS

Las tres clases de innovación y cuando usarlas

Por: Fernando Cárdenas E.
La innovación entendida como cualquier mejora significativa en los parámetros de valor que son importantes para el cliente o el consumidor, según la define Michael Tracy, puede ser entendida como parte de un espectro continuo. En el extremo izquierdo de este espectro tenemos la innovación incremental o lo que podríamos llamar “el cambio de lo conocido”. En el extremo derecho del espectro se encuentra la innovación disruptiva o lo que conocemos como: “el cambio completo de las reglas de juego”. En el centro del espectro se encuentra la innovación adyacente: “el cambio en las fronteras del negocio”.

Para poder definir cuando una compañía debe utilizar cada una de estas clases de innovación, es fundamental entender las características y la dinámica de la industria y del entorno en el que trabaja la organización. El contexto es lo más importante para poder priorizar las clases de innovación.    

1.      INNOVACIÓN INCREMENTAL

Cualquier compañía existente debe tratar constantemente de cambiar lo conocido. Esto le permite diferenciarse de la competencia. Si usted desea ser un nuevo jugador en alguna industria es muy probable que este tipo de innovación no sea de utilidad para entrar en ella y cautivar los clientes o consumidores.  Es mucho más efectiva para los lideres de la categoría en industrias con poco cambio. Es un buen comienzo para introducir las compañías al mundo de la innovación pero rara vez es suficiente para construir ventajas competitivas en el largo plazo.

Esta clase de innovación puede ser útil para las empresas existentes en mercados que aun tienen potencial importante de crecimiento en los que los competidores están concentrando sus iniciativas en mejorar los productos o servicios existentes y su empresa puede aprovechar esta oportunidad persiguiendo algún estilo distinto de innovación como la experiencia del cliente o la configuración del negocio. O cuando el mercado esta sufriendo de una falta general de innovación y tiene altas barreras de entrada que limitan las amenazas de innovaciones disruptivas.  

2.      INNOVACIÓN ADYACENTE

La innovación adyacente es interesante cuando en los mercados es necesario generar nuevo crecimiento a partir de las competencias y activos existentes o cuando se requiere cambiar la dinámica de la industria porque el crecimiento parece agotarse. En estos casos usted debe estar atento a oportunidades que utilicen sus capacidades y activos actuales en mercados diferentes o que permitan servir a los clientes en una forma ampliada complementando su oferta de productos o servicios.
Las compañías que persiguen esta clase de innovación están dispuestas y son capaces de cambiar la forma en que trabajan adaptando sus competencias y capacidades actuales o desarrollando unas completamente nuevas. Estas innovaciones son más riesgosas que las innovaciones incrementales pero por lo tanto son también más difíciles de copiar.


3.      INNOVACIÓN DISRUPTIVA

Todas las compañías deben pensar en formas de reinventar su negocio. En este caso es necesario estar dispuestos a jugar con reglas completamente diferentes y utilizar distintas competencias y activos. Esta innovación es importante cuando es necesario apostarle al crecimiento en forma dramática. Cuando los competidores están tomando acciones mucho más agresivas que requieren de reacciones más allá de lo tradicional.  Cuando los mercados no crecen, las barreras de entrada se están derrumbando y las fronteras de la industria se están desvaneciendo, aumentando los riesgos de una disrupción.

Esta innovación es mucho más riesgosa pero por lo tanto es la que genera los mayores retornos. Todas las organizaciones deberían tener una o dos fuentes de innovación disruptiva en su portafolio.


CONCLUSIONES

En la medida en que los contextos en los que operan las compañías se tornan más competidos e impredecibles, las empresas deben prepararse para adoptar las tres clases de innovación descritas en este artículo.  La innovación incremental puede servir como primer paso para introducir a la organización en los procesos de innovación. Sin embargo, a medida que la tecnología y las preferencias de los consumidores cambian, a medida que los ambientes competitivos se vuelven más agresivos e impredecibles, esta innovación no será suficiente. Las organizaciones tendrán que aprender a modificar sus competencias y aprovechar sus activos mediante innovación adyacente. No podrán descuidar las oportunidades de disrupción y los nuevos modelos de negocio y tendrán que desarrollar estructuras y culturas que permitan que las tres clases de innovación convivan dentro de sus empresas con diferentes esquemas de gobierno. De lo contrario, corren el riesgo de que pequeños emprendimientos o sus competidores, aprovechen las oportunidades de innovación y acaben por volver obsoletos sus productos, procesos o modelos de negocio afectando incluso su supervivencia

jueves, 27 de febrero de 2014

LA IMPORTANCIA DE LA CREACIÓN DESTRUCTIVA

La importancia de la creación destructiva para nuestras economías y empresas

Por: Fernando Cárdenas E.
A pesar de ser uno de los conceptos económicos mas antiguos y la esencia del emprendimiento y de la innovación, “La creación destructiva” sigue siendo ajena a las prioridades de los creadores de política en nuestros mercados y a las agendas estratégicas de quienes dirigen nuestras organizaciones.   

La respuesta a la pregunta de por qué algunas compañías explotan oportunidades que otros ignoran o que simplemente no pueden aprovechar para construir posiciones competitivas, nos lleva inexorablemente a estudiar la esencia del emprendimiento. Según el economista austriaco Joseph Schumpeter, el emprendimiento es la habilidad de actuar para aprovechar las oportunidades generadas por la innovación y por los nuevos descubrimientos.

Schumpeter afirma que la innovación hace que los mercados evolucionen siguiendo un patrón característico en el cual las empresas pasan por periodos relativamente tranquilos cuando han desarrollado productos, servicios, tecnologías o capacidades organizacionales superiores, que les permiten obtener retornos positivos. Estos periodos de tranquilidad se ven abruptamente afectados por “discontinuidades” que destruyen las fuentes existentes de ventaja competitiva y las remplazan por nuevas. Los emprendedores que sepan explotar las oportunidades que estas “discontinuidades” presentan, serán los llamados a lograr extraer retornos económicos durante el siguiente periodo de tranquilidad. Este proceso evolucionario es lo que Schumpeter llama “La creación destructiva”.

En otras palabras, la creación destructiva es el proceso continuo de generación de cambios tecnológicos y en los modelos de negocio que hacen obsoletas las competencias que han hecho a las compañías exitosas. Este antiguo pero poderoso concepto descrito en 1942, desafortunadamente aun no es entendido, ni practicado, por la mayoría de las personas encargadas de las políticas publicas y de los direccionamientos estratégicos de los negocios.

Los encargados de las políticas publicas en muchos de nuestros países aun prefieren esquemas de protección a las industrias por encima del apoyo a los emprendimientos en industrias disruptivas, y los administradores de las compañías siguen direccionando sus estrategias hacia la protección de sus líneas y modelos de negocios actuales en lugar de premiar aquellas iniciativas que los vuelven obsoletos.  

Para ser exitosos en los procesos de creación destructiva los países deben evitar proteger las industrias que están perdiendo ventajas competitivas a causa de nuevas tecnologías y modelos de negocio disruptivos. Los dirigentes de las industrias deben concentrarse en desarrollar capacidades por medio de estrategias de emprendimiento corporativo para reinventar sus negocios antes de que estos sean causa de disrupción por parte de terceros.

Desafortunadamente en muchos de nuestros países eso no esta sucediendo. Los creadores de políticas publicas aun protegen con subsidios industrias que han debido perecer hace muchos años victimas de la creación destructiva. Los empresarios de industrias que pierden competitividad luchan por medio de paros, lobbying y otros elementos de presión para que sus industrias sean subsidiadas o protegidas en lugar de dedicar sus esfuerzos a la construcción de nuevas competencias y a la exploración de nuevas alternativas de negocio.

¿Que tal que el gobierno americano se hubiera empeñado en proteger a Kodak de la disrupción que causaba la fotografía digital? ¿Que hubiera pasado si las directivas de Block Buster hubiesen realizado un paro para que el gobierno subsidiara su ineficiente modelo de negocio ante la aparición de Netflix y hubiesen sido exitosos en su empeño? Probablemente nosotros como consumidores no podríamos disfrutar de las maravillas de la fotografía digital, ni tendríamos la posibilidad de relajarnos viendo una película sin tener que salir de la casa para alquilarla. Pero peor aun, muchos desarrollos tecnológicos e innovaciones de modelo de negocio no hubieran tenido posibilidades de desarrollarse y muchas empresas que los aprovechan, no existirían. 


Schumpeter desde hace ya casi un siglo concluía que las ventajas competitivas están siempre en proceso de convertirse en obsoletas a medida que cambian las tecnologías, los gustos de los consumidores y las condiciones del entorno. Por lo tanto las compañías deberían estar siempre preocupadas por buscar la forma de construir puentes entre las discontinuidades que genera la muy famosa y poco entendida “creación destructiva”.     

viernes, 31 de enero de 2014

LA INNOVACIÓN EFECTIVA: Los 10 Tipos de Innovación.

La innovación efectiva

Por: Fernando Cárdenas E.
Hoy en día es difícil que pase un día normal sin que estemos expuestos al famoso tema de la innovación.  Estamos constantemente bombardeados por noticias, teorías y seudo-expertos que pretenden tener la solución mágica para convertirnos a nosotros y a nuestras compañías en innovadores.

El primer problema alrededor de estas constantes exposiciones al tema de la innovación es la falta de claridad acerca de su significado. No hay una definición compartida por todos los que utilizan el termino constantemente. Es sorprendente por ejemplo, como las personas utilizan la palabra innovación casi como sinónimo de tecnología. Algunas personas e inclusive organizaciones dedicadas a la promoción de la innovación entienden la innovación exclusivamente como la creación o la utilización de las tecnologías modernas a los negocios y no aceptan que la innovación puede existir en áreas de actuación diferentes a la tecnología.

En alguna ocasión tuve la oportunidad de escuchar al autor Michael Tracy definir la innovación en una forma que me llamo profundamente la atención. Desde entonces es esta la definición que utilizo para aclarar este concepto en todos los escenarios en los que surge la necesidad de definir el termino innovación. “Innovación es cualquier mejora significativa en los parámetros principales de valor que son importantes para los clientes y los consumidores”. Como notaran están resaltados los términos significativa, principales, importantes, clientes y consumidores y no aparece por ninguna parte la palabra tecnología. Esto por supuesto no quiere decir que la tecnología no pueda ser un elemento importante en la innovación. La tecnología puede crear condiciones adecuadas para la innovación y es un elemento transversal que facilita la facilita generando oportunidades para la creación de nuevos modelos de negocio.

Ahora que definimos la innovación, podemos entrar a discutir como hacer los procesos de innovación efectivos dentro de las organizaciones. La innovación casi nunca falla debido a falta de creatividad aunque la mayoría de los consultores se centran en esta parte del proceso. La mayoría de los procesos de innovación fallan por falta de cultura adecuada y por falta de disciplina.  La forma mas fácil de fallar es centrando el foco exclusivamente en los productos. Por eso las compañías exitosas utilizan varios tipos de innovación.


LOS DIEZ TIPOS DE INNOVACION

En el libro “Ten types of innovation: The discipline of building brakethroughs” Larry Keeley y sus coautores analizan los diez tipos de innovación que pueden adelantar las compañías. Muchas veces la innovación en las compañías esta centrada en procesos de ideación o de lluvias de ideas. El problema es que hay evidencia de que estas técnicas por si solas no llevan a resultados positivos. La innovación debe ser un proceso sistemático que se parece mas a una ciencia disciplinada que a un proceso artístico misterioso. Este proceso sistemático requiere la identificación de los problemas que realmente son importantes en los consumidores para entregar soluciones innovadoras a partir del análisis de los diez tipos de innovación. Según Keeley los diferentes tipos de innovación están separados en tres categorías: 1. Innovaciones de configuración, 2. Innovaciones de Oferta y 3. Innovaciones de experiencia.

INNOVACIONES DE CONFIGURACION:

Estas innovaciones están relacionadas con la configuración del sistema de negocios de las organizaciones y son : 1. De modelo de rentabilidad, 2. De redes, 3. De estructuras y 4. De procesos.

INNOVACIONES DE OFERTA:

Estas innovaciones se enfocan en los productos y servicios centrales de la compañía o en su combinación. Se trata de: 5. Innovaciones de funcionalidad del producto y 6. Innovaciones de los sistemas de productos y/o servicios.

INNOVACIONES DE EXPERIENCIA:

Las innovaciones de experiencia están relacionadas con los elementos y sistemas de la organización de cara a los clientes y consumidores que tienen que ver con sus experiencias. Son: 7. Innovaciones en el servicio, 8. Innovaciones en los canales, 9. Innovaciones en la marca y 10. Innovaciones en la interacción con el cliente.


El proceso sistemático de innovación debe entonces estudiar las posibilidades de combinar varios de estos tipos con el fin de construir una propuesta que modifique en forma significativa los principales parámetros importantes para el cliente y el consumidor para generar, capturar y entregar valor. 

sábado, 7 de diciembre de 2013

LAS CULTURAS QUE PROMUEVEN LA INNOVACIÓN

Las Culturas organizacionales que promueven la innovación.
Por: Fernando Cárdenas E.
En la entrega anterior mostramos los comportamientos de los lideres innovadores. Afirmamos que si bien los lideres innovadores nacen, cerca de un 75% de sus caracteristicas innovadoras pueden ser aprendidas. ¿Pero cuales son las culturas de las organizaciones que propician entonces que los innovadores desarrollen estos comportamientos?

En este artículo vamos entonces a presentar las características de las culturas organizacionales que han demostrado ser adecuadas para promover la innovación.

Varios autores, entre ellos Lumpkin y Dess, han estudiado los atributos de las culturas que son necesarios para poder considerar una organización emprendedora e innovadora.  Las dimensiones que estos autores han encontrado presentes en las organizaciones de este tipo son: 1. Autonomía, 2. Inventiva, 3. Pro-actividad, 4. Agresividad competitiva, 5. Capacidad de asumir riesgos y 6. Manejo adecuado del error.

AUTONOMIA
Según el diccionario Webster, autonomía es la posibilidad de tener independencia moral y libertad para auto dirigirse.  Es un estado de auto gobierno.

El emprendimiento y la innovación han sido producto de individuos con mentalidad independiente que toman la decisión de renunciar a posiciones cómodas y bien remuneradas con el fin de promover nuevas ideas y aventurarse a desarrollar nuevos mercados, en lugar de dejar que sus superiores y los procesos de sus organizaciones los desestimulen.  Dentro de las organizaciones, también ocurre, que los individuos y equipos que han logrado liderar y desarrollar emprendimientos corporativos y sus innovaciones, son aquellos a quienes se les ha permitido ejercitar su creatividad y adelantar en forma autónoma implementar las ideas necesarias para volver realidad estas innovaciones.

Es interesante entonces analizar dentro de nuestras culturas y dentro de nuestras organizaciones si en realidad las personas y los equipos cuentan con esta dimensión de autonomía. La creación de una Vicepresidencia de innovación y los altos presupuestos pagados a consultores internacionales en innovación, pueden convertirse en recursos perdidos en las organizaciones, si no existen los adecuados niveles de autonomía que sirvan de terreno abonado para el desarrollo de las ideas.

INVENTIVA
La inventiva refleja la propensión y tendencia de las organizaciones a comprometerse y a apoyar las nuevas ideas. Este concepto fue asociado por primera vez con el emprendimiento y la innovación por el economista austriaco Joseph Schumpeter, cuando en 1942 enunció el proceso económico que denominó “La creación destructiva”, mediante el cual la riqueza se construye a partir de las disrupciones de nuevos productos, servicios, tecnologías o modelos de negocio que mueven la asignación de recursos desde las compañías existentes para apoyar el crecimiento de nuevas compañías innovadoras.

En el contexto de una compañía la inventiva es la voluntad de la organización y de su personal para dejar a un lado las tecnologías, procesos, productos y modelos de negocio actuales y adoptar y desarrollar nuevas formas de hacer las cosas.

El éxito de nuestras organizaciones actuales es probablemente el peor enemigo de la innovación. Vale la pena preguntarnos si en estas organizaciones que aparecen todos los días en los diarios y las revistas de negocios, con sus ejecutivos nombrados como los más exitosos del momento, cabe esta “destrucción creativa”. ¿Será que estas organizaciones exitosas tienen la cultura y la capacidad necesaria para entender que el éxito pasado no es garantía del futuro? ¿Será que ellas están en condiciones de dejar a un lado los modelos de negocio y las competencias que los hicieron grandiosos para adoptar nuevas prácticas que las canibalicen? ¿O serán otras víctimas más de la creación destructiva liderada por nuevos emprendimientos innovadores?

¿Será que nuestros empresarios, gremios y gobernantes aceptan que hay industrias y compañías que dejaron de ser competitivas y que necesitan morir para ver nacer nuevas industrias con diferentes conocimientos y competencias que aporten al desarrollo? O continuaremos luchando con subsidios, paros y cabildeo para evitar la “creación destructiva” que ha demostrado ser inevitable en otras latitudes?

PRO-ACTIVIDAD
La pro-actividad está definida como la capacidad de actuar anticipadamente en relación con problemas, necesidades y cambios futuros. Las culturas proactivas son necesarias para cualquier proceso de innovación.  Es la forma en que las organizaciones identifican y reaccionan a oportunidades de mercado. Es lo que en alguna ocasión un CEO innovador definía como ver lo que los competidores no han visto aún, y reaccionar.

En mi opinión para que nuestras organizaciones puedan alcanzar un nivel adecuado de pro-actividad en sus culturas, es necesario entender la amplitud del mundo actual y abrir los horizontes. Para identificar a tiempo las oportunidades y poder reaccionar adecuadamente deben conocer a profundidad las tendencias en los mercados y los cambios en los consumidores a lo largo y ancho de la geografía mundial. Llama la atención en el caso de nuestros países, como muchas culturas organizacionales limitan su conocimiento de los mercados y de sus consumidores a escasos kilómetros de distancia de sus oficinas centrales o delegan estos temas exclusivamente en el personal comercial. La pro-actividad implica por definición que todas las personas en la organización deben tener sus sentidos atentos a identificar las oportunidades y disponer de los mecanismos y procesos necesarios para reaccionar rápidamente y poder  aprovecharlas.  


AGRESIVIDAD COMPETITIVA
La agresividad competitiva se refiere a la capacidad que tiene una organización de retar a sus competidores para alcanzar un mejor desempeño en el mercado.  Refleja también la voluntad de las compañías a utilizar métodos no convencionales para sorprender a sus competidores en lugar de depender de elementos tradicionales de competencia como el precio o el poder dominante.

Ésta a mi juicio es una de las características que menos se han desarrollado en los mercados altamente concentrados, de la mayoría de nuestros países Latino Americanos. Desafortunadamente muchas de las industrias en las que se desempeñan las compañías más exitosas de nuestros países son altamente concentradas, con estructuras oligopólicas o con alta concentración de poder. Esto ha hecho que nuestras culturas corporativas hallan desarrollado esquemas de competencia basados primordialmente en el posicionamiento y en muchos casos en la capacidad de mantener posiciones dominantes, más que en la construcción de capacidades para desarrollar esquemas innovadores de competencia agresiva. 
    

CAPACIDAD DE ASUMIR RIESGOS
Riesgo en este contexto es el grado en el cual los gerentes o ejecutivos de las organizaciones están dispuestos a comprometer recursos valiosos en proyectos que pueden tener una probabilidad importante de fracaso o de perdida. Las culturas emprendedoras e innovadoras facilitan que sus empleados tengan una mayor propensión a adelantar proyectos más riesgosos y a tomar decisiones más audaces para cumplir con sus objetivos de crecimiento.

En una serie de entrevistas a profundidad que realizamos con actores del ecosistema de emprendimiento de Medellín, como parte de un estudio reciente que LIFT hizo para Ruta N (Organización que lidera la innovación y el emprendimiento de alto impacto en la ciudad de Medellín), aparece la clara evidencia de que la baja capacidad de asumir riesgos de los ejecutivos, empresarios e inversionistas en la ciudad es uno de los principales inhibidores del emprendimiento y la innovación.  Es interesante entender el origen de esta reciente aversión al riesgo y probablemente debería ser parte de futuras investigaciones.  Paradójicamente, cuando analizamos la historia emprendedora de la región a la cual pertenece Medellín, encontramos en las generaciones pasadas multitud de experiencias innovadoras como las de los mineros de titiribí, los empresarios pujantes que desarrollaron las industrias textiles, financieras, cerveceras y cementeras, además de los grandes aportes a la industria aeronáutica. Por razones que aún no logramos entender completamente, las generaciones que los sucedieron perdieron en gran medida esa maravillosa capacidad de tomar riesgos.

MANEJO ADECUADO DEL ERROR
La forma en la que las personas y las organizaciones manejan el error y las fallas es fundamental para el desarrollo de la innovación y el emprendimiento. Thomas A. Edison decía: “Yo no he fallado. Simplemente he encontrado 10 mil maneras que no funcionan de hacer las cosas”.  Esta visión de entender el error y la falla como un proceso de aprendizaje se convierte en un elemento esencial de las culturas que promueven la experimentación entendiendo que un alto número de estos intentos no va a funcionar pero va a generar un valioso conocimiento para la organización y para  sus miembros.

Esta dimensión es probablemente la más grave en la inhibición de la innovación y el emprendimiento en nuestros entornos de negocio. Y tal vez sea la explicación a por qué las más recientes generaciones en la región de Medellín perdieron la capacidad de tomar riesgos que mencionamos anteriormente. La capacidad de adelantar iniciativas innovadoras se ve cuartada cuando las organizaciones buscan culpables y no entienden los errores y las fallas como procesos naturales del emprendimiento, que lo único que hacen es reforzar nuestro proceso de aprendizaje.

Thomas Watson el antiguo CEO de IBM decía: “Si quieres tener éxito, duplica tu número de fracasos”
  

En conclusión, si queremos desarrollar organizaciones innovadoras es necesario que trabajemos en la construcción de culturas que den autonomía a los empleados y a los equipos, que promuevan la inventiva y se comprometan con apoyar el desarrollo de nuevas ideas, que investiguen las tendencias en los mercados y conozcan los consumidores en todo el mundo y estén preparadas para aprovechar las oportunidades que se presentan, que sean creativas y dinámicas a la hora de competir agresivamente, que estén en capacidad y tengan la voluntad para asumir riesgos y que experimenten y entiendan las fallas como oportunidades de aprendizaje.

viernes, 8 de noviembre de 2013

¿Los líderes innovadores nacen o se hacen?

El ADN de innovación: ¿Los líderes  innovadores nacen o se hacen?
Por: Fernando Cárdenas E.
La mayoría de las personas están de acuerdo hoy en día en que la innovación es un elemento fundamental para el éxito de todos los negocios.  La capacidad de innovar es la única fuente de ventaja competitiva sostenible, es la “salsa secreta” de los negocios exitosos. Es difícil pasar un día completo sin oír hablar del tema. Sin embargo, muy pocas personas conocen en realidad de que se trata. Mucho menos, de que hace que una compañía o una persona sean innovadoras. ¿Qué hace que una persona desarrolle ideas innovadoras o haga posible la innovación?

¿QUÉ HACE A LOS INNOVADORES DIFERENTES DEL RESTO DE LOS MORTALES?
  
Muchas personas creen que se trata de una condición genética que se tiene o no se tiene desde el nacimiento. Sin embargo, estudios realizados por investigadores en gemelos demuestran que solamente cerca de un 30% de los resultados de estos gemelos en exámenes de creatividad pueden ser atribuidos a factores genéticos.  La inteligencia, por otra parte, ha demostrado que tiene que ver en cerca de 80% con factores genéticos.

Otros estudios similares muestran que entre el 25% y el 40% de las innovaciones que logramos como seres humanos dependen de nuestras características genéticas. Esto es una excelente noticia para todos aquellos que no nacimos con los genes de Steve Jobs, púes significa que cerca de dos tercios de la innovación dependen de comportamientos que pueden ser aprendidos por cualquier persona normal. Para eso es necesario entender cuáles son las habilidades que se deben desarrollar, luego practicarlas consistentemente para ganar confianza en nuestra capacidad de innovar. Es algo similar a como se aprenden destrezas para jugar un deporte como el golf o el tenis. Primero es necesario entender las características de la técnica, para luego practicar hasta adquirir la confianza necesaria para jugar el deporte sin necesidad de pensar en cada movimiento.

Una investigación adelantada por Clay Christensen de Harvard y otros co-autores que entrevistaron a cerca de 5 mil ejecutivos y fundadores de compañías los llevó a concluir que hay básicamente 5 habilidades que distinguen a los líderes innovadores de los ejecutivos promedio.  Hay cuatro habilidades de exploración y descubrimiento que activan una quinta habilidad cognitiva. Estas cuatro habilidades de exploración son:

PREGUNTAR Y CUESTIONAR
Los líderes innovadores preguntan en forma incansable y cuestionan permanentemente el status quo. Los estudios muestran que hay una gran relación entre la innovación y las personas que preguntan en forma repetidas por qué? Preguntar por qué cinco veces seguidas ayuda a llegar a la causa profunda de los problemas y consecuentemente facilita el diseño de soluciones innovadoras y de fondo. La otra pregunta que ha demostrado tener relación con la innovación es: ¿Qué pasaría si…? Cuando los lideres cuestionan el estado actual de las cosas y preguntan cómo sería el mundo si hiciéramos cosas diferentes aparecen soluciones innovadoras que pueden ser la base de productos, servicios, procesos o modelos de negocio.

OBSERVAR
Los innovadores observan cuidadosamente el mundo incluyendo clientes y consumidores en sus ambientes naturales y la forma en que utilizan los productos y servicios. El conocimiento profundo de las personas mediante observación y estudios etnográficos puede ser la fuente de información que permita la creación de productos o servicios innovadores e incluso la que permita entender la aplicación de la tecnología o de un modelo de negocios disruptivo que acabe cambiando la historia de un negocio o de una industria.

CREAR Y UTILIZAR REDES
Los líderes innovadores se rodean de personas con diversidad de perfiles, conocimientos y experiencias. Les encanta tener personas que piensen diferente, que los cuestionen y que les den ideas para desarrollar sus innovaciones.

EXPERIMENTAR
Los innovadores están constantemente planteándose hipótesis que requieren ser rápidamente testeadas al menor costo posible y con la mayor velocidad. Están constantemente experimentando con productos, servicios o modelos de negocio con el fin de recopilar información, validar o negar estas hipótesis y aprender para realizar los ajustes necesarios y seguir experimentando.

ASOCIAR
Estas cuatro habilidades facilitan que los innovadores descubran nuevas formas de hacer las cosas al hacer uso de una habilidad cognitiva de los seres humanos que se conoce como la “asociación”. La asociación permite a los seres humanos conectar ideas de áreas del conocimiento o de ambientes completamente distintos. Ayuda a que información que aparentemente es irrelevante en un contexto, sirva para resolver un problema no relacionado de otro contexto. La asociación hace que se generen conexiones inesperadas en el cerebro de los líderes innovadores que han estado expuestos a diversos ambientes y disciplinas.


En el próximo artículo vamos a profundizar sobre las condiciones y características de las culturas, necesarias en las organizaciones, para facilitar el desarrollo de estos comportamientos innovadores.