jueves, 29 de enero de 2015

LOS MONOPOLIOS QUE NOS GUSTAN

Los monopolios que nos gustan

Por: Fernando Cárdenas E.
El concepto central de la estrategia competitiva de una compañía con ánimo de lucro es el de como crear y capturar valor con objetivo de rentabilidad. 

La creación de valor es bastante intuitiva y en general la mayoría de las compañías tratan de lograrla.  La captura es más interesante y retadora para las empresas. En términos prácticos, la creación de valor es el equivalente al tamaño de la pizza que ordenamos para una reunión de varias personas; y la captura de valor es en realidad que tan grande es la tajada de la pizza que realmente logro yo comerme.

La creación de valor es la diferencia entre la voluntad de pago que tienen los clientes o consumidores y el costo económico de producir y comercializar el producto o servicio. Mientras mayor sea esta diferencia, mayor es el valor creado.  El valor capturado por el productor es la diferencia entre el precio que se cobra por los productos o servicios y el costo de producir y comercializarlos. De la misma forma el valor capturado por el cliente o consumidor es la diferencia entre su voluntad de pago y el precio que realmente paga por los productos o servicios.

Los valores capturados por el productor y por el comercializador dependen de la estructura competitiva de los mercados.

En un extremo tenemos la competencia perfecta, en donde no existe diferenciación, hay múltiples oferentes y el precio está determinado por el mercado. En este caso ninguno de los participantes logra capturar valor por encima de los costos económicos que incluyen el costo del capital. 

En el otro lado del espectro competitivo están los monopolios. Como los monopolios no tienen competencia, estos producen los volúmenes y definen el precio, que maximizan sus  utilidades y por lo tanto la captura de valor.

Desde el punto de vista de los consumidores y de la sociedad en general, la competencia perfecta es deseable. Sin embargo, desde el punto de vista de las empresas y de sus accionistas, los monopolios son la estructura ideal. Será entonces que todos los monopolios son malos para la sociedad? Si no todos son malos, cuales son entonces los buenos?

Los monopolios o poderes dominantes creados de forma ilegal, como carteles o las  compañías que utilizan sus influencias políticas y económicas para mantener su condición de poder de mercado, y aquellas industrias que son favorecidas sin razón por los gobiernos; son los que podríamos llamar monopolios malos.

Los monopolios buenos son aquellas compañías que son tan buenas en lo que hacen que no hay otras empresas que logren ofrecer sustitutos cercanos a sus productos o servicios.  
Podríamos decir que los monopolios se merecen su mala reputación cuando se trata de países en los que nada cambia. En general, en estos países los monopolios que existen son los monopolios malos cuyo papel es asegurarse de mantener el estatus quo para seguir disfrutando de su captura de valor.

En los países innovadores existen los monopolios buenos, compañías creativas e innovadoras que se inventan nuevas categorías y que dan a los clientes y consumidores alternativas y variedad.

La conclusión para gobiernos, empresarios y emprendedores es clara. Para crear y capturar valor en el largo plazo, al tiempo que se benefician los compradores, es necesario promover y construir negocios diferenciados que no tengan sustitutos cercanos. Es decir, para crear y capturar valor sin afectar el beneficio general hay que tener monopolios pero de los buenos.


viernes, 9 de enero de 2015

LOS INCENTIVOS PARA INNOVAR

Los incentivos para Innovar

Por: Fernando Cárdenas E.
La historia empresarial está llena de casos en los cuales las grandes compañías, con recursos, conocimiento de los mercados, canales de distribución establecidos y liderazgo en las industrias, han sido desplazadas hasta ser en algunos casos llevadas a la quiebra, por pequeñas compañías.  Cuando este tipo de cosas sucede, algunas personas argumentan que las compañías pequeñas son más agiles, sus ejecutivos y fundadores más visionarios y con mayor capacidad de asumir riesgos, mientras que los que dirigen las grandes corporaciones son miopes, menos arriesgados y están trabajando dentro de estructuras lentas y burocráticas. Será que ésta es la explicación adecuada?

Sí bien esta descripción coincide con muchas de las compañías que conocemos en nuestros mercados, no necesariamente tiene la profundidad para explicar por qué, las compañías grandes, dirigidas por profesionales racionales y capacitados, sistemáticamente pierden las batallas competitivas en el campo de la innovación disruptiva, contra los pequeños jugadores.

Una explicación de este fenómeno puede ser que las compañías grandes tienen problemas de incentivos y están llenas de influencias inadecuadas. Estos problemas incluyen lo que los economistas llaman el costo de agencia. Este costo aparece cuando los directivos y los empleados de la compañía tienen intereses diferentes a los de los accionistas. En el caso particular de la innovación, los intereses de los ejecutivos y empleados pueden no estar alineados con los de los accionistas en relación con las inversiones en innovación. Los costos de influencia, que Clay Christensen define como el dilema del capitalista, se presentan cuando los ejecutivos influyen para priorizar proyectos cuyos retornos son de corto o mediano plazo, que normalmente no son los más innovadores o disruptivos.   

Otra explicación de por qué las grande compañías no quieren innovar bajo ciertas condiciones económicas, tiene que ver con dos efectos: El efecto de los costos hundidos o “sunk costs” y el efecto de reposición.

Los costos hundidos surgen cuando una compañía ha comprometido recursos importantes en una tecnología, producto o modelo de negocio. Desde el punto de vista de la compañía que ya está comprometida, las inversiones adicionales en esta misma dirección son menores a las de innovar, pues los costos hundidos pertenecen al pasado y no deben ser considerados a la hora de tomar decisiones de inversión. Mientras que en contraste, para una compañía que entra al negocio y que no se ha comprometido aun con una tecnología, producto o modelo de negocio, es lógico comparar las inversiones necesarias para todas las alternativas disponibles y por lo tanto no está sesgada para tomar decisiones en ninguna dirección.    

El efecto de reemplazo o reposición fue estudiado por el Nobel de economía Kenneth Arrow hace más de 30 años. Arrow consideró la posibilidad de innovar en mercados monopólicos o concentrados (condiciones muy comunes en la mayoría de las industrias en nuestros países Latinoamericanos). Todo lo demás igual, Arrow concluye que la compañía que está apenas entrando a una industria monopólica tienen mayores incentivos para innovar y está dispuesta a invertir más en innovación que la compañía que actualmente está en el mercado aprovechando el monopolio. Esto se debe a que las ganancias adicionales de la innovación son menores para la compañía que ya esta establecida en el mercado.

En la práctica todos los efectos anteriores ocurren simultáneamente con otro efecto que se conoce como el efecto de eficiencia. Este efecto ocurre cuando la compañía que domina el mercado tiene más que perder que lo que puede ganar la compañía que entra. En estos casos en donde la amenaza de nuevas entradas es importante para las empresas existentes con poder dominante, las llamadas a innovar son las empresas existentes y no los nuevos jugadores.

La gran pregunta es entonces, ¿Que tan inminente es en nuestros mercados la entrada de nuevas compañías disruptivas? Mientras las condiciones y reglas de juego sean adecuadas para promover la competencia agresiva, las nuevas empresas tengan condiciones para que se puedan desarrollar y entren a participar en los mercados, tanto los nuevos participantes como los existentes, tendrán incentivos para innovar. Esto sin duda mejora la competitividad de los países y las posibilidades de desarrollo económico.  


La solución entonces está entonces en promover el desarrollo de nuevas empresas innovadoras, garantizar reglas de juego claras y equitativas y castigar sin piedad las prácticas dominantes.            

miércoles, 10 de diciembre de 2014

19 FORMAS DE LOGRAR TRACCIÓN EN LAS EMPRESAS

19 Formas de lograr Tracción en las Empresas

Por: Fernando Cárdenas E.
En el mundo empresarial moderno empiezan a aparecer una serie de términos nuevos que tienen que ver con el emprendimiento y la innovación. Uno de estos términos es la tracción empresarial. La palabra tracción, en ingeniería mecánica define la fuerza de empuje ejercida por un vehículo contra la superficie sobre la que se desplaza con el fin de alcanzar velocidad. Podríamos decir entonces que la adaptación de la palabra al mundo empresarial sería la fuerza que hace que las compañías avancen y crezcan. Es decir, una muestra de que las compañías están despegando en los mercados con su oferta de valor.    

En su libro Traction, Weinberg y Mares describen la tracción como la mejor manera de mejorar las posibilidades de éxito de los nuevos negocios. Según ellos, la tracción es básicamente la evidencia cuantitativa de que existe demanda por parte de los clientes, o sea la validación de que hay posibilidades concretas de crecimiento.

La pregunta que inmediatamente surge entonces es: ¿Como se puede lograr que nuestras compañías alcances tan anhelada tracción?

Los autores del libro mencionado, encontraron 19 canales de tracción empresarial:

1.      Mercadeo Viral:
Este mecanismo consiste basicamente en encontrar formas de crecer la base de usuarios fomentando que los usuarios existentes promuevan el uso de los productos y servicios de la empresa y refieran nuevos usuarios.

2.      Relaciones Publicas:
Es el arte de construir relaciones con los reporteros con el fin de llamar la atención de los medios de comunicación relevantes para que promuevan los productos, servicios y la marca.

3.      Relaciones Publicas no convencionales:
Este mecanismo de tracción se basa en hacer cosas extrahordinarias que llamen la atención de los medios.

4.      Mercadeo de Motores de Busqueda (SEM):
Utilizar los motores de busqueda como Google para promocionar los productos o servicios a las personas que realizan busquedas.

5.      Avisos en redes sociales:
Utilizar publicidad en redes sociales como facebook, youtube, twitter y otras de nicho para conseguir nuevos clientes.

6.      Avisos offline:
Estos son los avisos tradicionales en medios masivos como televisión, radio, revistas relevantes, folletos y flyers y vallas.

7.      Optimización de motores de busqueda (SEO):
Para este canal de tracción se utilizan procesos que aseguren que las paginas web de la compañía aparescan en los primeros resultados en las busquedas de los usuarios relevantes.

8.      Mercadeo de contenidos:
Es la utilización de blogs en las paginas web de las empresas con el objetivo de utilizar estos contenidos como plataformas para generar interes en clientes potenciales.

9.      Email marketing:
Consiste en utilizar el correo electronico para enviar mensajes interesantes a los clientes potenciales invitandolos a tomar acciones concretas con miras a conocer y probar los productos o servicios de la compañía. También dentro de este canal de tracción se encuentran los transactional o lifecycle mails que son enviados a los clientes existentes dependiendo de las acciones especificas que cada cliente tome en relación con los productos o servicios de la compañía. Un ejemplo de estos ultimos es el de los mails enviados cuando se deja de entrar a la plataforma por un tiempo determinado o después de que se raliza una compra, interacción o transacción.

10.  La ingenieria como mercadeo:
Algunas compañías utilizan recursos de ingenieria como kits, micrositios o herramientas para que los clientes se familiaricen con los productos o servicios para generar leads de negocios potenciales.  

11.  Blogs dirigidos:
Colaboración o alianzas con blogs segmentados que tienen audiencias importantes y relevantes de clientes potenciales.

12.  Desarrollo de negocios:
Se trata de la creación de alianzas estrategicas con otras compañías con el fin de complementar o integrar la oferta o las capacidades de ambos participantes. Estas alianzas incluyen licencias, franquicias, joint ventures, contratos de distribución o de proveeduría, etc.  

13.  Ventas:
Es el proceso tradicional para generar leads de negocio, calificarlos y priorizarlos y convertirlos en clientes. Este canal es particularmente importante para negocios que requieren de la interacción personal para la compra.

14.  Programas de afiliados:
Un programa de afiliados es aquel en el que una compañía le paga una comisión a otras o a personas por traer un cliente potencial o por realizar una venta. Compañías como Amazon y otros citios de comercio electronico utilizan este canal para adquirir una proporción importante de sus clientes. 

15.  Plataformas existentes:
En este canal de tracción se hace uso de plataformas existentes como websites, apps o redes con el fin de atraer a sus clientes a los productos o servicios de la compañía. Algunas empresas han logrado tracción por ejemplo publicando juegos o apps en la plataforma de Facebook.

16.  Ferias y eventos:
Las ferias y eventos son oportunidades importantes para interactuar con clientes, proveedores y aliados asi como para tener mejor información del mercado y de los competidores. Pueden ser utilizados para lanzar nuevos productos o para hacer anuncios importantes acerca de la compañía, o como parte integral del embudo de ventas para prospectar y convertir clientes.

17.  Patrocinio de conferencias:
Este canal se trata de patrocinar o de montar reuniones pequeñas o grandes conferencias para posicionar la compañía en el mercado. Estos patroc
inios de eventos son especialmente importantes para aquellos negocios en los cuales los clientes no responden bien a los medios digitales o en los que los ciclos de venta son particularmente largos.

18.  Charlas y cursos:
Se trata de que personas calificadas de la empresa sean invitadas a dar charlas o cursos especializados con el fin de construir una imagen de profesionalismo y expertise en temas relacionados con la oferta de la compañía.

19.  Desarrollo de comunidades:
El desarrollo de comunidades implica invertir tiempo y recursos ayudando a que los clienyes y usuarios de la compañía desarrollen interacciones y relaciones con el fin de atraer más personas y aprender de ellos para mejorar la oferta y los servicios. Los miembros de estas comunidades se convierten en evangelizadores de los productos y servicios. Un ejemplo clasico de este canal de tracción es la comunidad de Harley Davidson.  

La experiencia muestra que la mayoría de las compañías se concentra en los mismos canales de tracción sin explorar las oportunidades que ofrece esta gran diversidad de alternativas. Casi todas las compañías utilizan unos cuantos de estos canales sin explorar el resto. Como es muy difícil desde el principio predecir los resultados de las diferentes alternativas para alcanzar tracción, la única manera de saber cuáles realmente funcionan para su compañía es empezar a ensayar varias de ellas y probar sus resultados. Es importante también tener en cuenta que los resultados de los canales de tracción cambian en el tiempo con la madurez y los avances de las compañías, por lo que se hace necesario constantemente estar experimentando con ellos para enfocarse en aquellos con los mejores resultados en cada etapa del ciclo empresarial.  


lunes, 10 de noviembre de 2014

LECCIONES DEL NOBEL DE ECONOMÍA PARA LATINO AMÉRICA

Lecciones del Nobel de Economía para Latino América

Por: Fernando Cárdenas E.
El 13 de Octubre de este año el economista francés Jean Tirole fue galardonado con el premio Nobel de economía.  Tirole, Doctor en economía del MIT y hoy profesor del Toulouse School of Economics, fue premiado por su contribución al estudio de los monopolios, las empresas con poder dominante y el papel que los gobiernos deben jugar para controlar sus efectos negativos en los mercados. “Tirole ha aclarado la manera de entender y regular los sectores en los que hay unas cuantas empresas poderosas", manifestó la Real Academia Sueca de Ciencias.

Qué podríamos aprender en nuestros países sobre los estudios realizados por Tirole? Hasta qué punto nuestros gobiernos deberían intervenir en los mercados? Cómo afectan los comportamientos de las compañías con poder dominante el bienestar general, a sus proveedores, a sus clientes y a sus competidores?

Tirole, ha desarrollado modelos rigurosos para entender en forma realista los comportamientos e implicaciones de los monopolios y los poderes dominantes facilitando su análisis y generando recomendaciones acerca de cómo se deben regular en beneficio del bien común.  Como consecuencia de esto, los gobiernos y las autoridades de regulación y control de muchos países, están más alerta a los daños potenciales que este tipo de estructuras de mercado pueden generar en sus economías.

Uno de los avances más importantes del Nobel tiene que ver con la modelación de “la captura regulatoria”. Está es una forma de corrupción política que se da cuando una agencia regulatoria, en lugar de actuar en el interés común, apoya los intereses de aquellos que dominan la industria o el sector que la agencia debería regular.  

Los monopolios y poderes dominantes disminuyen las alternativas de decisión de los consumidores, reducen los incentivos para innovar y controlan la oferta afectando los precios y a la sociedad en general.

Al afectar los precios y reducir la variedad y cantidad de productos y servicios en los mercados, estos poderes dominantes, imponen desde el punto de vista de los consumidores el equivalente a un impuesto que en lugar de ser recaudado por los gobiernos, va a parar al bolsillo de los empresarios.

Los poderes dominantes a la compra o los monopsonios pueden dictar las condiciones a sus proveedores, incluyendo el mercado laboral de la misma manera que los monopolios afectan el mercado. Sus efectos sobre la movilidad laboral, sobre el empleo y sobre el emprendimiento pueden también ser dramáticos.

Los gobiernos tienen varias alternativas para reaccionar cuando se presentan poderes dominantes y monopolios: 1. Tratar de hacer que estas industrias sean competitivas y no abusen de su poder, obligándolas a que se separen en diferentes unidades de negocio, no permitiendo fusiones o alianzas que perjudiquen a los consumidores, multando o inclusive llevando a la cárcel a sus ejecutivos cuando su actuación se aleja del proceder de una industria competitiva. 2. Regular el comportamiento de los jugadores, controlando los precios o la rentabilidad. 3. Volviendo los monopolios privados, empresas publicas, y 4. Hacer nada y dejar que estos afecten el bien común.

La primera alternativa de acción de los gobiernos es la más simple y obvia. Sin embargo, en muchos de nuestros países es increíble como día tras día observamos desviaciones de la competencia en todas nuestras industrias sin que pase nada. Hay cantidades de fusiones que aumentan el poder dominante o incluso dejan participantes con posiciones casi monopólicas que nadie seria capaz de explicar. Es más fácil que las personas del gobierno que tienen que evitar estos comportamientos sean cambiados, que estos objeten y eviten que estas concentraciones de poder sucedan. Tampoco son buenos nuestros gobiernos a la hora de multar o castigar las colusiones y otros comportamientos indebidos. No conozco el primer caso en latino américa de un presidente o ejecutivo de una compañía que haya pasado algunos años en la cárcel como consecuencia de una negociación de precios o mercados con sus competidores. Ni que hablar de los medios de comunicación, que cuestionan airadamente por los comportamientos de poder dominante, para rápidamente olvidarlos pues en la mayoría de los casos se trata de sus principales anunciantes. 

Tirole, construyó varios modelos basándose en las industrias de comunicaciones, electricidad y el sector financiero para guiar a los gobiernos con herramientas que les permitan regular el comportamiento de los jugadores en beneficio del bienestar común. También estudió la captura regulatoria, que a mi juicio es uno de los principales problemas de nuestros países. Este tipo de corrupción de cuello blanco, ampliamente aceptado en nuestros países, en la cual las industrias o grupos de interés son exitosos en lograr que las regulaciones y su cumplimiento beneficies el desarrollo de sus negocios. 

Que bueno sería que varios de nuestros gobernantes pudieran asistir al Tolouse School of Economics para tomar unas clases con Tirole. Cuanto necesitamos que nuestras entidades de regulación y control sean independientes y faciliten el desarrollo del emprendimiento y la innovación en lugar de favorecer a los grandes jugadores que dominan las industrias tradicionales. Excelente sería que castigaran implacablemente los comportamientos anticompetitivos y que evitaran las fusiones y adquisiciones que concentran aun más esos poderes dominantes y que regularan los precios o las rentabilidades de aquellos monopolios naturales siguiendo las enseñanzas y modelos de este gran Nobel de economía.